Se agrava la cr1sis para pacientes de la Nueva EPS

La crisis del sistema de salud sigue profundizándose en Cúcuta y Norte de Santander. En las últimas horas, la Clínica San José anunció que, debido a la grave situación financiera generada por los retrasos en los pagos de la Nueva EPS —actualmente en intervención—, solo atenderá urgencias vitales a los afiliados de esta entidad. La institución advirtió que el insuficiente flujo de recursos y la acumulación de deudas hacen imposible mantener una operación asistencial normal.

“Debido a la crisis financiera generada por el insuficiente flujo de recursos y los reiterados retrasos en los pagos por parte de la Nueva EPS en intervención, nos encontramos ante una situación que impide la operación normal de nuestros servicios”, señala el comunicado emitido por la clínica. Además, la institución subrayó que esta es la primera vez que deben aplicar medidas de contingencia frente a esta EPS, concentrándose únicamente en situaciones que comprometan de manera inmediata la vida o la integridad de los pacientes.

A esta decisión se suma la de la Clínica Medical Duarte, que a comienzos de semana también informó la suspensión parcial de sus servicios por la misma causa. En un comunicado fechado el 20 de noviembre, la entidad aseguró que durante el 2025 solo ha recibido pagos correspondientes a cuatro meses de servicios, generando un riesgo financiero crítico. Por ello, también decidió limitar la atención a urgencias vitales hasta recibir los recursos adeudados.

La situación ha generado alarma entre los veedores de salud del departamento, quienes anunciaron una posible marcha en Cúcuta para llamar la atención del Gobierno Nacional. “Vamos a hacer una marcha general, una toma real de la ciudad para que en Bogotá sepan que estamos vivos, que no nos queremos seguir muriendo en los hospitales ni en las calles”, expresó el veedor Hermes Madrid.

Mientras tanto, el Hospital Universitario Erasmo Meoz —que también atraviesa dificultades económicas por las deudas acumuladas de las EPS y del Gobierno— es actualmente la única institución que continúa prestando atención a los afiliados de la Nueva EPS en la ciudad, situación que aumenta el riesgo de colapso del sistema hospitalario regional.