Alarmante cifra: 390.000 niños sufren desnutrición en Colombia

La Guajira, Córdoba y Nariño concentran los niveles más altos de vulnerabilidad alimentaria infantil, mientras que en Bogotá las localidades del sur siguen siendo las más golpeadas por el hambre.

Colombia enfrenta una de las crisis silenciosas más graves de los últimos años: 390.000 niños menores de cinco años viven en estado de desnutrición crónica, de acuerdo con el más reciente informe presentado por la Asociación de Bancos de Alimentos de Colombia (ABACO).

El documento revela que, aunque en algunas regiones del país se observan leves mejoras, la inseguridad alimentaria continúa afectando a cientos de miles de familias, especialmente en zonas rurales y apartadas.

La Guajira, epicentro del hambre infantil

El departamento de La Guajira mantiene el índice más alto de desnutrición infantil en el país, una situación que se ha vuelto estructural y que afecta, en particular, a comunidades indígenas y rurales. Según el director de ABACO, Carlos Buitrago, esta región “sigue siendo el reflejo más doloroso del hambre en Colombia”.

A pesar de los esfuerzos institucionales, las cifras no ceden. Los departamentos de Córdoba, San Andrés y Nariño también presentan altos niveles de vulnerabilidad alimentaria, con una preocupante tendencia de aumento en zonas rurales donde el acceso a alimentos básicos es cada vez más limitado.

Bogotá mejora, pero el hambre persiste en el sur

En contraste, la capital del país ha mostrado una leve mejoría. “Bogotá pasó de un índice de 27 puntos en 2023 a 23 en 2024, lo que refleja avances en seguridad alimentaria. Sin embargo, aún tenemos grandes retos para erradicar las causas del hambre infantil”, explicó Buitrago.

Las localidades de Ciudad Bolívar, Usme y Bosa siguen encabezando la lista de sectores más afectados, donde la pobreza multidimensional y el desempleo continúan poniendo en riesgo la adecuada nutrición de miles de niños y niñas.

Una alianza por la nutrición del país

Desde el sector privado, la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI) trabaja junto a ABACO en una estrategia conjunta para combatir la desnutrición. Su director de Industria, Camilo Montes, afirmó que el objetivo de esta alianza es ambicioso:

Una deuda pendiente con la infancia

Mientras la economía avanza y el país busca consolidar una agenda social, las cifras de desnutrición infantil reflejan que cientos de miles de menores siguen creciendo sin los nutrientes básicos para desarrollarse plenamente. Expertos advierten que si no se adoptan políticas sostenidas y territoriales, el hambre seguirá cobrando vidas en silencio.