“Perdí mis brazos y nadie responde”: joven atacado por jauría de perros exige justicia

Greiber, de 19 años, fue brutalmente agredido por nueve perros callejeros. Hoy exige justicia ante la Fiscalía, mientras el Estado guarda silencio. ¿Quién responde?

A sus 19 años, Greiber Eduardo Berrío no solo enfrenta las secuelas físicas de un ataque aterrador, sino también la indiferencia de las autoridades. El joven, quien fue atacado por nueve perros mientras caminaba por una calle del barrio Bosa, perdió ambos brazos y sus orejas tras sufrir más de 150 mordeduras. Hoy, desde su casa, pide que su caso no quede sepultado por el olvido ni por la burocracia.

Este miércoles, sus abogados radicaron una denuncia formal ante la Fiscalía General de la Nación por lesiones personales, argumentando que el predio donde ocurrió el ataque es propiedad del Estado perteneciente al Instituto de Desarrollo Urbano (IDU)y que ya existían denuncias previas por la presencia de estos animales sin control.

“Cada vez que recuerdo ese día me paralizo. No puedo ver perros sin sentir que me atacan”, declaró Greiber a medios capitalinos, visiblemente afectado.

¿Dónde estaban las autoridades?

El hecho ocurrió hace meses, pero solo hasta ahora los abogados del joven lograron reunir elementos suficientes para demostrar que hubo omisiones graves por parte de las entidades distritales. No hay registro oficial de un reporte policial el día del ataque, a pesar de que vecinos ya habían alertado sobre la peligrosidad de esa jauría.

Además del devastador daño físico, Greiber también libra una batalla emocional: pasó semanas en una UCI, ha requerido múltiples intervenciones médicas y terapias, y ahora inicia un camino legal para exigir que su tragedia no quede impune.

¿Y qué ha hecho la Alcaldía?

En su momento, la Alcaldía de Bogotá informó que, tras el ataque, se logró la entrega voluntaria de cuatro perros por parte del tenedor de los animales. Fueron trasladados a observación por parte de la Unidad de Cuidado Animal, pero hasta la fecha no hay claridad sobre qué ha pasado con ellos ni con los otros cinco involucrados.

No se ha anunciado ningún tipo de sanción ni avance disciplinario o penal, mientras la vida de un joven quedó marcada para siempre.