Reportan: La peor crisis de la salud en la historia de Colombia.

Medios nacionales como la silla vacía buscaron el concepto de 12 expertos del sector, hay debacle sanitaria.

El problema es estructural, pero con gran culpabilidad de las estrategias del gobierno de Gustavo Petro.

En 30 años, la cobertura del sistema de salud se triplicó y llegó a casi el 100%

En un foro virtual convocado por el Nuevo Liberalismo, los expresidentes Álvaro Uribe y César Gaviria, junto con varios precandidatos presidenciales ajenos al petrismo, coincidieron en que Colombia enfrenta la peor crisis de su sistema de salud en décadas.

Los participantes señalaron al actual gobierno como principal responsable de la debacle, al tiempo que advirtieron que este tema será decisivo en la campaña presidencial que se avecina.

El diagnóstico de expertos y exministros consultados por La Silla Vacía revela que la situación combina problemas estructurales, comunes a todos los sistemas sanitarios del mundo, con fallas de gestión en la administración de Gustavo Petro.

Los datos lo reflejan: entre mayo de 2024 y mayo de 2025 las tutelas por salud crecieron un 16%, y las quejas por vulneración del derecho aumentaron un 80%. Además, los colombianos hoy gastan más de su propio bolsillo y deben esperar más que nunca para una cita médica.

La presión financiera se entiende en un contexto global. Como explica el investigador Johnattan García, de la Universidad de Harvard, “todos los sistemas de salud están en crisis”, debido al envejecimiento de la población, el crecimiento en la demanda y el costo de nuevas tecnologías.

En Colombia, la apuesta por un acceso casi universal a los servicios se enfrenta a la falta de recursos suficientes para sostenerlo.

No obstante, el sistema también ha tenido avances históricos. La Ley 100 de 1993 permitió pasar de un modelo excluyente a uno de aseguramiento universal, con cobertura que pasó del 22% al 99% de la población.

 Sin embargo, el mismo éxito trajo un peso difícil de soportar: la avalancha de tutelas y gastos por servicios no incluidos en el Plan Básico de Salud.

Entre 2007 y 2009, esos costos extraordinarios se triplicaron, y desde entonces la carga financiera no ha dejado de crecer, alimentando una crisis que hoy golpea con más fuerza.